Más de diez años viviendo en el mismo bloque y apenas habíamos cruzado
cuatro palabras aparte del ‘hola’ y ‘hasta luego’ en el portal, aunque bien
es cierto que en una casa de 16 plantas y 4 puertas en cada una, tampoco
vas a intimar con todos los vecinos.

De todas formas tampoco soy una chica muy habladora, y por lo visto, él
tampoco, aunque recuerdo que cuando me vine a vivir aquí (yo era una
renacuaja de unos 10 años, ahora tengo 20) sí que jugueteamos juntos con
sus hermanas y mi hermano alguna vez, pero ha llovido mucho desde entonces.

Recuerdo que de pequeño era más bien feo, aunque al hacerse mayor se ha
puesto bastante bien, mejor dicho, está bastante bueno… es alto, pelo
claro, un poco delgado…no está nada mal

Siempre que subiamos en el ascensor no hablabamos nada, a excepción del
‘hola’ y ‘adios’, aunque notaba que a veces le hubiera gustado hablar algo
mientras llegabamos a su piso, y a veces se cruzaban nuestras miradas, que
rápidamente apartábamos al techo o al suelo, ya que supongo que le cortaba
un poco empezar él la conversación…

Un viernes por la noche, como todos los viernes, salí a dar una vuelta con
las amigas, aunque al cabo de un par de horas se puso a llover, y como
apenas había gente y no parecía que fuese a parar, tras unas copas en un
pub y un poco de charla entre mujeres , me fuí a casa procurando no mojarme
demasiado…

Cuando llegué al portal, ví desde fuera que dentro había alguien esperando
el ascensor. A veces suelo preferir esperar a que coja el ascensor y se
vaya quien sea, para entrar luego yo (prefiero subir sola, es una manía que
tengo), aunque como llovía mucho, abrí la puerta y entré.

Tras pasar y cerrar la puerta, ví que era el vecino del 11º el que estaba
esperando el ascensor. -‘Hola’, le digo, mientras para mis adentros me fijo
en ese culito tan rico.. -‘Ah, hola’, me responde

Mientras esperamos que llegue el ascensor, ninguno decimos nada… solo
oimos cómo las gotas de lluvia se estrellan en el suelo de la calle.

Me abre la puerta para que pase y luego entra él. Pulsa el botón de su piso
(de sobra sabe que yo vivo más arriba). Mientras vamos subiendo noto que
esa noche me mira fijamente, solo apartando la mirada cuando ladeo la
cabeza y le miro yo…

Llegamos al 11, su piso… abre la puerta, pero se para de repente y se
vuelve hacia mí, sin salir… Se me queda mirando fijamente, y sin saber
por qué, se agacha levemente hasta poner sus labios entreabiertos sobre mi
boca durante un segundo, tras lo cual se aparta y me mira a los ojos
extrañamente seguro de sí mismo, como dándome tiempo a reaccionar..

Me quedo mirándole sorprendida y un poco titubeante, cuando vuelve a la
carga… Esta vez su ‘ataque’ va en serio. Mientras cierro los ojos y me
dejo llevar, su lengua se introduce entre mis labios entreabiertos,
retorciéndose tratando de unirse a la mía, que no tarda en aceptar la
invitación y se une a la suya en suaves latigazos dentro de mi boca.

Mientras nos deleitamos disfrutando de nuestros profundos y calientes
besos, sus manos empiezan a ascender lentamente desde mis caderas… con
suavidad y delicadeza cubre con su mano mi pecho izquierdo por encima de mi
camisa, el cual empieza a amasar como si de un experto panadero se tratase,
aunque noto que eso no le vale, ya que se apresura a desabrocharme los
botones de la camisa y a introducir sus frias manos por mis costados hasta
mi espalda…… el cierre de mi sujetador le esperaba..

Tres segundos tarda en desbrocharlo, algo más de lo que le cuesta agarrar
mis dos pechos con sus ya calientes manos… Mientras se regocija amasando
con fuerza mis bien dotados senos, veo como estoy arrinconada en una
esquina del ascensor, al tiempo que nos pegamos tanto el uno al otro que
noto como su pene estaba ya duro como una roca…

Aparta sus labios de mi boca, y sin soltar mis pechos, empieza a chupar mis
pezones, erectos desde el principio, mientras intenta murmurar palabras sin
duda relacionadas con lo que ambos estabamos disfrutando.

Le agarro por su ya despeinado cabello y aprieto más su cara contra mis
pechos, mientras él se afana en mordisquear mis duros pezones, cada vez más con más fuerza, lo que hace subir mi temperatura cada vez más…..

Sin dejar de lamer mis pezones y areolas, suelta sus manos de mis pechos y
a tientas agarra mi culo por debajo de mi minifalda vaquera. Apretando mis
nalgas con igual fuerza que antes hacía con mis pechos, recorre milímetro a
milímetro mi culo mientras vuelve a meterme la lengua en la boca… Noto
que esto no hay quien lo pare….Saco su camisa del pantalón e introduzco
la mano por su pecho y espalda…mmmm, que cuerpecito tiene el condenado..

Los gemidos y nuestras respiraciones entrecortadas espero que no despierten
a ningun vecino… Su mano derecha ahora se entretetiene frotándome el coño
por encima de la braguita, que cada vez lo tengo más humedo y caliente…
Con un milimetrado movimiento de su mano, desde el ombligo baja, entre mi
braguita y mi estomago, decididamente hasta cubrir completamente con sus
dedos la entrada de mi vagina…. los mueve haciendo circulos, con
delicadeza… Cielos, que placer!!! Yo no pierdo el tiempo y desabrocho
como puedo los botones de su pantalón y agarro esa barra de acero que debe
ser su polla….

Como leyéndome el pensamiento, él mismo se apresura en desabrocharse el
cinturón de sus vaqueros y bajarselos, a la vez que también se baja los
calzoncillos, mostrándome su polla, tiesa y dura como una roca, esperando
ser acariciada como se merece por una dama que la supiera apreciar..

Instintivamente la empiezo a acariciar, reaccionando ante mi contacto como
si tuviera vida propia, poniendose si cabe más dura… él me suplica que se
la chupe, cosa que me desconcierta un poco, ya que nunca se lo había hecho
a ningún chico…pero no pude resistirme.. Mientras me agacho hincando las
dos rodillas en el suelo del ascensor (sin soltar el preciado trofeo, por
supuesto), él retira para atrás la piel que medio cubría su capullo,
mostrándomelo en todo su esplendor…

Me lo meto en la boca y empiezo a chuparsela.. A él se le escapa un gemido
de placer.. Procuro hacerlo bien, como en las peliculas X que solíamos ver
en casa de una amiga…

Él se mueve acompasadamente atrás y adelante mientras yo engullo como puedo
el caliente miembro con mi lengua y mi boca todo lo abiertas que pueden
estar, ya que su miembro no era pequeño precisamente… Tiene un sabor
extraño, aunque me gusta…y más a él, claro…

De repente me aparta la cabeza, supongo porque no querrá correrse dentro de
mi boca, aunque no me hubiera importado nada probar el sabor de su semen
salpicándola…

Me agarra de los codos y tira de mí hasta ponerme de pie…. No puedo
quitar ojo a ese pene tieso todavía cubierto de mi saliva…cómo ansío
tenerlo dentro de mí…

Se apresura a agacharse para subirme más la minifalda y bajarme las
braguitas… Mientras lo hace, acerca su cara a mi pubis, y sin siquiera
pedirselo hace un alto en su camino para dar unas lenguetadas a mi ya
dilatada vagina… Qué placer, mmmm, que bien me separa los labios y me
folla con su lengua…

Se pone de pie, y se muy bien que ha llegado el momento de ser penetrada…
le pregunto con voz entrecortada por los jadeos, por si tiene alguna
enfermedad o ‘algo’ que me pueda ‘pegar’, rezando porque me diga que no…
Así lo hace, y aunque sin condón, como en un par de días me ha de venir la
regla, no creo que sea el momento de preocuparse por nada más que por
sentir cómo clava su estaca entre mis dos piernas…

Estamos los dos de pie…dobla las rodillas levemente mientras con la mano
derecha enfila la punta de su polla entre mis dos piernas… Con una ligera
presión de su pene contra mi vulva localiza sin problemas la entrada de mi
vagina….. y de una decidida embestida me penetra todo lo que da de sí la
longitud de su polla…

Creo que grito de placer…. Como si en ello nos fuera la vida, nos
contorneamos rítmicamente mientras su varonil miembro entra y sale de mi
coño rebosante de flujo…

Estamos sudando… Me agarra con fuerza las nalgas para aposentarse mejor
en su delicada misión de follarme…

Durante unos minutos entra y sale de mí como un poseso… Poco a poco
aumenta la velocidad y violencia de sus embestidas… creo que me voy a
correr… mmmmmhhmm!!, grito mientras se me escapan varias lágrimas y casi
se me nubla la visión…. cierro los ojos mientras disfruto de este
maravilloso orgasmo…….. !cielos, que placer!…

Él también se corre… siento como fluye a borbotones su semen en mi
interior, lo cual hace prolongar mi orgasmo……..mhhmmmmmm..

Sin sacar todavía su pene de mis entrañas, tratamos de recuperar la
consciencia y el ritmo de respiración…Nos miramos a los ojos mientras le
agarro por la cintura y el pellizca suavemente mi pezón derecho…

Se aparta para sacar su exhausto miembro de dentro de mí y lentamente se
viste mientras yo hago lo mismo… ‘Ha sido maravilloso… hasta otro día’,
susurra mientras me besa tiernamente… Se da media vuelta y sale del
ascensor mientras me abrocho la camisa todavía sintiendo escalofrios por el
placer que acababa de sentir…

Las 2:55… creo que hoy voy a dormir como pocas noches…

Por rocio

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