Ignacio Allende Fernández, popularmente conocido como Torbe, el principal productor de porno español, fue detenido este lunes por presuntos abusos sexuales de menores, por difusión de pornografía infantil y por trata de seres humanos, según fuentes cercanas a una investigación sobre la que se mantiene el secreto de sumario.
El empresario vasco (Portugalete, 1969), habría sido detenido junto a al menos otras cinco personas —entre las que habría una mujer de 35 años— este lunes, que se encontrarían en dependencias policiales pendientes de pasar a disposición judicial. Supuestamente Torbe, también conocido como «rey del porno español», formaría parte de una red de trata de mujeres procedentes de países del Este, ucranias en su mayoría, entre las que habría chicas de 16 años, a las que habría grabado manteniendo sexo con él y posteriormente habría difundido esas imágenes, de ahí la acusación de difusión de pornografía infantil.
En ningún caso, el también actor y director de cine porno, estaría acusado de violación, según las mismas fuentes. Las relaciones sexuales se habrían mantenido siempre con mujeres de más de 13 años.
La policía ha llevado a cabo una docena de registros en los que se ha intervenido dinero (más de 5.000 euros), teléfonos y documentación que servirían para acreditar las acusaciones. A los seis detenidos se les imputa un delito de trata de seres humanos, prostitución, pertenencia a organización criminal, agresión sexual, pornografía infantil, delito contra la intimidad y contra la salud pública.
Ya en octubre de 2006, Torbe fue detenido acusado de incluir a una chica de 17 años en una de sus películas. Dos días después fue puesto en libertad sin cargos por el juez. Nunca se llegó a emitir el vídeo de esa chica y declaró que había sido víctima del engaño de otras personas.También declaró que desconocía el hecho probado de que fuera menor de edad, asegurando que siempre les exigía el carné de identidad.
En la investigación han trabajado conjuntamente la Brigada Central contra la Trata de Seres Humanos (UCRIF-CGEF), la Brigada Central de Investigación Tecnológica (UIT) y la Brigada Central de Blanqueo de Capitales y Anticorrupción (UDEF), porque «también se le persigue por algún asunto de evasión fiscal».